CRÓNICA: Inferno Sur Festival (Brothers till we die + Ebola dp + Onomasy + Dugo + Physis + Nuclear Antichrist)
El viernes 12 de mayo fue en Sevilla el comienzo de una nueva tendencia dentro de los conciertos: El Inferno Sur Festival se bautizó con fuego, sangre y sudor. El cartel era llamativo y, sé de buena fuente, que muchos desconfiaban un poco por el recorrido de algunos grupos, pero todas las bandas, desde las más recientes, hasta las más experimentadas, han brindado un desempeño que ha impactado a todos los asistentes. Las más de 200 personas que asistimos nos encontramos con un aquelarre que no ha tenido desperdicios y nunca bajó de intensidad.
La organización fue impecable, se respetaron los horarios y fue una suerte ya que la Sala X había puesto un tope horario por otras actividades. Pero tanto la gente de la puerta, como el técnico de sonido y la técnico de luces, ayudaron a que fuera un show desde el primer grupo hasta el cierre. Uno no podía cerrar los ojos para no perderse lo que vendría a continuación. Producciones Speakon había comentado que su objetivo era el trato respetuoso al público y las bandas: lo han certificado y conseguido. Ahora pasemos a lo importante: las bandas, intentaré ser breve y concreto. Pero desde ya les digo que la entrega de TODOS fue al cien por ciento, que hubo muy pocos fallos, y esto se debe a que se ha notado que han ensayado a morir y que todos querían dar un golpe sobre la mesa.
A las 20.15 se subieron los debutantes de Nucear Antichrist. Estaban nerviosos, pero eso incluso les jugó a favor. Son los más chicos del cartel (en cuanto a edad) pero le han puesto tanta furia y originalidad, tanta velocidad y violencia, que se estuvo hablando de ellos toda la noche. A modo personal, remarco la versión de Venom y el cierre del show. Las bases rítmicas estuvieron bien, aunque debo decir que hay que ajustar un par de cosillas en cuanto a lo técnico. Los Nuclear tienen muchas ganas de arrasar y comerse el mundo, tienen con qué, sobre todo cuando cerrado el festival, cerca de las 3 de la mañana, se van de nuevo a la sala de ensayo para seguir trabajando.
Luego los muchachos de Physis que presentaban E.P. "Squared Sequence". Fue un show apretado y consistente. El vocalista entregó todo lo que tenía, la banda sonó pareja, y le vamos a dar una estrella a la batería que funcionó siendo la verdadera plaga. No vamos a definirlos dentro de un estilo porque a ellos no les gusta, y es verdad, las etiquetas hacen daño, a veces, y en esta ocasión, debo decir que el directo de esta gente ha sido más poderoso que el disco. Corran, escúchenlo a fondo y presten atención a las letras, hay un trasfondo social que los hará temibles.
Luego llegaron los Dugo. Debo decir que ha sido otra buena apuesta del Inferno Sur. Presentaban "Gotas de brea", y era el debut también de esta agrupación. Otra sorpresa con un sonido más liviano, pero metal, que se han llevado una ovación de parte del público en general. Son novedosos, equilibrados y muy limpios. Solo he recogido buenas sensaciones de parte de la gente y la canción Tiras a Matar es pegadiza, poderosa y bien hecha.
Hasta aquí las bandas locales y, supuestamente, menos reconocidas. Nos han pegado tres patadas en las costillas y nos consumieron buena parte de la energía. Repito que uno iba esperando ver un directo “normal” de grupos de tan breve recorrido, pero han estado a la altura, y han dado un nivel excelente, tanto al festival, como a la ciudad de Sevilla.
Entonces, muy rápido, se subieron los muchachos de Onomasy, que venían desde El Ejido a dar un toque relevante al cartel. Y voy a utilizar unas metáforas para un directo desbordante. Mientras los veía montar y probar sonido con esa parsimonia del verdugo que va a trabajar, me vino la imagen del Señor Lobo de Pulp Fiction. Llegaron, hicieron su trabajo con una sangre fría brutal, y se fueron. Onomasy está en un escalón altísimo, sé que a muchos les sorprende que desde Andalucía salga este demonio, pero no deberían. Me asomé a verlos pegado al escenario y, mientras los escuchaba, me dejé arrastrar por la marea de gente que estaba siendo destrozada por ese sonido, y me hundí con la certeza de que en poco tiempo Onomasy será por calidad y fuerza, un ejemplo de Death Metal Técnico a nivel europeo. Va ocurrir como esas cosas implacables de la naturaleza.
Hablando de implacables fuerzas de la naturaleza, lo de Ebola dp ha sido despiadado. Se notaban que eran locales, que llevaban 8 meses sin tocar en su ciudad, y nos han traído un despliegue en el escenario que ha roto mandíbulas. Le dieron a KHROM una nueva vuelta de tuerca, como si dijeran de pronto que están en modo “Normal”, y luego se pasan a modo “destrucción del Universo”, destriparon a los que estábamos allí con su sonido y brutalidad. Cada integrante se lo tomó de modo personal y nos han tratado con una crueldad que todavía tengo marcas. El giro de pequeños detalles, como aparecer tras un telón blanco en juego de sombras, o el aspecto bandolero al cerrar con Machete, ha sido un regalo a su público fiel y desbordado: los asolaron. La experiencia y la entrega hacen de Ebola dp un grupo que arrasa donde vaya, como sea y a quien quiera.
Y ya para terminar una noche que hizo temblar la ciudad, Brothers till we die, se subieron a que su sonido particular terminara de limpiar las cenizas que quedaban de los asistentes. Presentaron trabajo “The Thin Line Between Death and Immortality” y nos han dejado con ganas de más. Me sorprende la liviandad con la cual miran a la gente y luego los destruyen. Me dejaron impactado también por su sonido. Es como si no les costara trabajo. El vocalista es la punta de una lanza que amenaza con no romperse, pero sí partir cuanto le pongan en frente, y lo próximo para ellos es el Resurrection Fest.
Ha sido una noche que cumplió con creces todo lo prometido. La gente que fue respondió a las propuestas de la banda, todos se han dejado la piel, tanto organización como producción y staff y las bandas, claro. Felicidades Sevilla por esta apuesta donde se han puesto todos de acuerdo para que las puertas del Inferno Sur, queden abiertas por mucho tiempo. El próximo no te lo podés perder.
Texto por Sebas Abdala
La organización fue impecable, se respetaron los horarios y fue una suerte ya que la Sala X había puesto un tope horario por otras actividades. Pero tanto la gente de la puerta, como el técnico de sonido y la técnico de luces, ayudaron a que fuera un show desde el primer grupo hasta el cierre. Uno no podía cerrar los ojos para no perderse lo que vendría a continuación. Producciones Speakon había comentado que su objetivo era el trato respetuoso al público y las bandas: lo han certificado y conseguido. Ahora pasemos a lo importante: las bandas, intentaré ser breve y concreto. Pero desde ya les digo que la entrega de TODOS fue al cien por ciento, que hubo muy pocos fallos, y esto se debe a que se ha notado que han ensayado a morir y que todos querían dar un golpe sobre la mesa.
A las 20.15 se subieron los debutantes de Nucear Antichrist. Estaban nerviosos, pero eso incluso les jugó a favor. Son los más chicos del cartel (en cuanto a edad) pero le han puesto tanta furia y originalidad, tanta velocidad y violencia, que se estuvo hablando de ellos toda la noche. A modo personal, remarco la versión de Venom y el cierre del show. Las bases rítmicas estuvieron bien, aunque debo decir que hay que ajustar un par de cosillas en cuanto a lo técnico. Los Nuclear tienen muchas ganas de arrasar y comerse el mundo, tienen con qué, sobre todo cuando cerrado el festival, cerca de las 3 de la mañana, se van de nuevo a la sala de ensayo para seguir trabajando.
Luego los muchachos de Physis que presentaban E.P. "Squared Sequence". Fue un show apretado y consistente. El vocalista entregó todo lo que tenía, la banda sonó pareja, y le vamos a dar una estrella a la batería que funcionó siendo la verdadera plaga. No vamos a definirlos dentro de un estilo porque a ellos no les gusta, y es verdad, las etiquetas hacen daño, a veces, y en esta ocasión, debo decir que el directo de esta gente ha sido más poderoso que el disco. Corran, escúchenlo a fondo y presten atención a las letras, hay un trasfondo social que los hará temibles.
Luego llegaron los Dugo. Debo decir que ha sido otra buena apuesta del Inferno Sur. Presentaban "Gotas de brea", y era el debut también de esta agrupación. Otra sorpresa con un sonido más liviano, pero metal, que se han llevado una ovación de parte del público en general. Son novedosos, equilibrados y muy limpios. Solo he recogido buenas sensaciones de parte de la gente y la canción Tiras a Matar es pegadiza, poderosa y bien hecha.
Hasta aquí las bandas locales y, supuestamente, menos reconocidas. Nos han pegado tres patadas en las costillas y nos consumieron buena parte de la energía. Repito que uno iba esperando ver un directo “normal” de grupos de tan breve recorrido, pero han estado a la altura, y han dado un nivel excelente, tanto al festival, como a la ciudad de Sevilla.
Entonces, muy rápido, se subieron los muchachos de Onomasy, que venían desde El Ejido a dar un toque relevante al cartel. Y voy a utilizar unas metáforas para un directo desbordante. Mientras los veía montar y probar sonido con esa parsimonia del verdugo que va a trabajar, me vino la imagen del Señor Lobo de Pulp Fiction. Llegaron, hicieron su trabajo con una sangre fría brutal, y se fueron. Onomasy está en un escalón altísimo, sé que a muchos les sorprende que desde Andalucía salga este demonio, pero no deberían. Me asomé a verlos pegado al escenario y, mientras los escuchaba, me dejé arrastrar por la marea de gente que estaba siendo destrozada por ese sonido, y me hundí con la certeza de que en poco tiempo Onomasy será por calidad y fuerza, un ejemplo de Death Metal Técnico a nivel europeo. Va ocurrir como esas cosas implacables de la naturaleza.
Hablando de implacables fuerzas de la naturaleza, lo de Ebola dp ha sido despiadado. Se notaban que eran locales, que llevaban 8 meses sin tocar en su ciudad, y nos han traído un despliegue en el escenario que ha roto mandíbulas. Le dieron a KHROM una nueva vuelta de tuerca, como si dijeran de pronto que están en modo “Normal”, y luego se pasan a modo “destrucción del Universo”, destriparon a los que estábamos allí con su sonido y brutalidad. Cada integrante se lo tomó de modo personal y nos han tratado con una crueldad que todavía tengo marcas. El giro de pequeños detalles, como aparecer tras un telón blanco en juego de sombras, o el aspecto bandolero al cerrar con Machete, ha sido un regalo a su público fiel y desbordado: los asolaron. La experiencia y la entrega hacen de Ebola dp un grupo que arrasa donde vaya, como sea y a quien quiera.
Y ya para terminar una noche que hizo temblar la ciudad, Brothers till we die, se subieron a que su sonido particular terminara de limpiar las cenizas que quedaban de los asistentes. Presentaron trabajo “The Thin Line Between Death and Immortality” y nos han dejado con ganas de más. Me sorprende la liviandad con la cual miran a la gente y luego los destruyen. Me dejaron impactado también por su sonido. Es como si no les costara trabajo. El vocalista es la punta de una lanza que amenaza con no romperse, pero sí partir cuanto le pongan en frente, y lo próximo para ellos es el Resurrection Fest.
Ha sido una noche que cumplió con creces todo lo prometido. La gente que fue respondió a las propuestas de la banda, todos se han dejado la piel, tanto organización como producción y staff y las bandas, claro. Felicidades Sevilla por esta apuesta donde se han puesto todos de acuerdo para que las puertas del Inferno Sur, queden abiertas por mucho tiempo. El próximo no te lo podés perder.
Texto por Sebas Abdala
Comentarios
Publicar un comentario